domingo, 24 de diciembre de 2023

Misa del Gallo. 2023

VIVENCIA DE LA MISA DEL GALLO. 2023

 


     
“La noche santa no la debemos dejar de dormir”,
y para ello permanecimos en Vigila nocturna y contemplativa en la tribuna de nuestra iglesia.

 Noche sumamente fría, delicada, tierna y gozosa porque el Niño de Belén, acampa entre nosotros.

 A las 23.00 h. del 24 de diciembre celebramos esta Vigilia de la Natividad del Señor, donde Mons. Alberto José González Chaves, armonizó toda la Liturgia de las Horas y la comunidad cantó todo el Oficio Divino. Las moniciones, los silencios y el resonar de cada salmo y antífona, nos fue calentado nuestro corazón para esta noche santa. Terminando él Te Deum a las 23.55 h.

 En la sacristía se revistó con los ornamentos sagrados y la Misa del Gallo, empezó solemnemente a su hora.

 

 Esto fue un gran regalo de nuestro Señor, para nosotras ya que por otros motivos ajenos a la comunidad, no se celebraba hacía ocho años. Dios rico en su misericordia nos concedió este privilegio de tener esta Misa, con este santo sacerdote, en la noche en que San Francisco cumpliéndose los 800 años, en Greccio experimentó la dulzura de un niño que se hace uno como nosotros y es Dios.

 Una Misa que fuimos arrebatadas en la contemplación de este gran misterio de la Encarnación y que la bellísima homilía de Mons. no tenía desperdicio alguno, por ello transcribo parte de la misma que transcurrió 18.47 minutos, -para enriquecimiento de quienes lean este escrito sencillo-.

 Una señal: un niño. ¡Qué señal! Todos estos tiempos no tiene nada que ver con las señales a que nosotros estamos acostumbrados. A señales llamativa, deslumbrantes, a veces atemorizantes, casi siempre sorprendente, de un niño ¿Qué señal es? Tanto que lo es, para quien tiene alma de niño. Ese sí, sabe destruir y aprovechar las señales.

 Yo, con atrevimiento le decía al pobrecillo de Asís: Francisco, que me dejara asomarme un poco a su alma, esa alma que es un volcán de fuego y un panal de miel, para ver esa alma preciosa, de un hombre, tan hombre que me servía un poco de eso que se le hayan llamado Serafín de Asís.

 Después de la venida de Cristo, nadie ha sido más hombre que Francisco, porque nadie se ha parecido tanto a Cristo, como Francisco, y es porque resonó en su corazón esta palabra evangélica: “Si no volvéis a ser como niños, no entrareis en el Reino de los cielos”. Los niños nacen desnudos y Francisco se desnudó en público en la plaza de su pueblo; -tanto que el obispo tuvo que cubrirle con su manto-, quiso expresar que como los niños, no tiene más riqueza que “Dios”.

 Francisco vivió sus más despreocupantes por el mañana y se desposó con la dama pobreza, llamando hermanos al sol y a la luna, a los pajarillos, a los hombres todos,  y a la hermana muerte. Es muy grande el alma de Francisco.

 Comentó lo que sucedió una noche como esta en Greccio, cuando hoy se cumplen los 800 años en que Francisco, representó el primer belén, que años tras años y generaciones y generaciones has seguido manteniendo y que tanto bien hace.

 Bonito fue el recorrido que hizo de su experiencia en estos lugares santos de la vida de Francisco, y como aún hoy se respira su espiritualidad franciscana.

 También él fue un privilegiado según dijo en su homilía, donde fue contando los varios centenarios que había vivido, desde el VII centenario del nacimiento de Francisco (1182-1982), hasta llegar a estos de los 800 años de la Navidad en Greccio.

 Una Misa muy solemne y en un ambiente totalmente contemplativo, porque es un lugar santo donde todo el día está el Señor Expuesto Solemnemente en la Custodia.

 Con la bendición a todo el pueblo, las imágenes que los fieles habían traído de sus hogares quedaron bendecidas.

 En esta noche pusimos la imagen de un Niño Jesús, en los brazos de la imagen de San Francisco de Asís, que está en el retablo, queriendo simbolizar lo que sucedió en aquella noche de Navidad del santo.

 Quedamos sorprendidas porque después de haber avisado con nuestros carteles, para esta misa, asistieron 25 personas entre ella familias con sus hijos y parejas de novios.

 ¡Gloria y honor a Ti, Señor Jesús!

 En Alabanzas del hermano Francisco de Asís.

 


 

 


 

 


 




No hay comentarios:

Publicar un comentario