Acto de Desagravio y de Reparación por la burla ocurrida en la inauguración de los Juegos Olímpicos

El domingo 4 de agosto de 2024, pudimos ver como nuestro templo se llenó de fieles para participar en el acto de Desagravio y Reparación por la terrible blasfemia ocurrida hace unos días en la apertura de los Juegos Olímpicos en Paris.

Dolor e indignación antes estas representación ocena, burlonas y donde la misma evoca a la muerte, donde el hombre no quiere cuentas con Dios. ¿Por qué esta ofensa ha sido hecha contra muchos cristianos y creyentes? ¿Esto lo que muchos trabajan por la libertad de expresión? ¿Libertad sólo para expresar ellos lo que desean en sus vidas muertas?

Sin complejo alguno por nuestra parte, nosotras comunidad de Clarisas Descalzas, en un acto muy sencillo y en poco tiempo hemos querido dar testimonio de fe, en lo fundamental de nuestra vida de creyente: el amor a la Iglesia y el respeto a la Sagrada Eucaristía, donde se mantiene en nuestro templo con la Adoración Diurna.

A las 11.00 h. nuestro templo estaba bastante llenos de fieles que quisieron permanecer en oración, reparación y desagravio ante la Exposición Solemne del Santísimo Sacramento Expuesto.

Este silencio fue interrumpido por las campanas de la torres que nos invitaba al rezo del Ángelus, y seguidamente se comenzó el Rezo del Santo Rosario, para que la Virgen Mª se lo presentará a su divino Hijo, en reparación de esta blasfemia y las que constantemente se están cometiendo en el mundo entero. Se repartieron unas pequeñas hojas para que los fieles pudieran rezar con nosotras el acto de desagravio, donde se pudo pedir perdón por «las horribles blasfemias», por los «atentados contra la Iglesia», por los «desprecios y burlas» a la Eucaristía y también por la «frialdad» de muchos cristianos ante este tipo de ofensas, por todos los pecados que se comenten.

Cuando eran las 12.25 h. el Rvdo. Sr. D. Francisco José Trabadela Gómez, Capellán del Monasterio, dio la bendición con el Santísimo y lo reservó en el sagrario para comenzar la Santa Misa dominical.

Comenzó su homilía, diciéndoles a las monjas la que habíamos liado con esta convocatoria, cuando el templo estaba a tope, por la convocatoria sencilla de un cartel en la puerta de la iglesia. Agradeció la asistencia y devoción de aquellos que asistieron. Donde dijo que hoy si no hubiera sido domingo, se celebraría la memoria de San Juan Mª Vianney, sacerdote Francés, -en donde se ha realizado la blasfemia-. Muy devoto de la Eucaristía y del confesionario donde los Franceses acudían a él para recibir por la confesión el perdón de Dios.

Jesús se nos presenta en este domingo como el “Pan de la vida eterna”. La obra de Dios es cree en el que nos ha enviado. El encuentro con Cristo es el que da sentido a nuestras vidas. La fe nos sostiene y con ella caminamos hasta que seamos llamados a su presencia.

El día anterior una señora tuvo el gesto precioso de obsequiar un precioso ramo de flores para que lo colocáramos ante el Santísimo. Detalles de amor y delicadeza ante este gran misterio de salvación.

En este evento también estuvieron algunos periodistas de la Crónica de Badajoz, que previamente fue entrevistada la M. Abadesa por el torno y seguidamente pasaron a la iglesia para hacer su reportaje y salir en la prensa pacense.

Sentimos el apoyo de muchas personas que por los medios de comunicación social, nos felicitaron y se unión a esta intención.

¡Sea por siempre bendito y alabado el Santísimo Sacramento del Altar!